desintoxicación. dos mil diez: que me quieras. acá todos hablan muy rápido. una mínima esperanza. un brotecito. un vaso de helado de limón, un vasito. no lo puedo perdonar. ya no hay juego, ni jugo. no lo puedo perdonar. un mensaje de texto con su nombre, me crece un árbol en el pecho, y las ramas se me meten por la boca y las orejas. dos mil once: que me enseñes.

no es tan fácil caminar

mis pasos quiebran el suelo
y todos salen de sus casas, se asoman por las ventanas
para ver ese infierno que llevo conmigo
adonde sea que vaya-

yo me pongo el

buzo que me reclamás, y dejo que tu voz siga vibrando.
maldito seas. maldito sea el verano.
ojalá pudiera pedirte abiertamente que te quedes a perder conmigo:
tiempo, dinero, cordura, kilos. después de eso, sólo nos quedarían las cosas lindas para ofrecer.
todos sufren de lo mismo.
agoniza mi estómago.
agonizan mis ganas de seguir queriendo formar
círculos perfectos con los dedos.
me aburre saber ciertas cosas de vos que nadie sabe,
son comodines que no me hacen ni feliz, ni triste.
el calor se corporiza y empieza a caminar por el balcón.
qué pasará si le doy Cepita con hielo?

acá no hay nada más para destruir

y dejá de temblar, que si viene un king kong enorme enorme
tenemos muchas rubias para presentarle.

rep etic iones.

no importa cuánto haga, ni cuánto diga. nunca es mucho, nunca alcanzo a cubrir el porcentaje de utilidad. y si no hago nada que para vos sea grandioso, entonces no te sientas orgulloso de mí.
si nos damos un beso compartimos menos baba que tocando la misma melódica
si nos decimos cosas lindas podemos desinyectarnos la rabia de los diarios
tu remera está manchada de pintura, y tengo la teoría de que desnudo brillás en la oscuridad.
vos no reconocerías el amor
ni aunque el mismo te estuviese mutilando las extremidades con una
motosierra.

suci o.

qué tristeza.
la humedad que te sube por las piernas.
la desesperación tan característica de los sábados.
la lluvia de la san puta que se viene.
retrocede seis casilleros. seis casilleros?! este juego es una porquería.
y así fué que se fué,
no sin antes decirme que me vaya a la mierda.
(por qué no le hacés caso alguna vez y te vas a la mierda?)

G(A)NE AQUÍ

con los ojos llenos de carteles luminosos y mensajes subliminales.
mientras se me enfría la cola sobre el cemento de la vereda. el que no arriesga no gana. me creí el verso, me la paso arriesgando y este colectivo siempre tarda una eternidad.
ah, pero cuando viene me siento una campeona.

destino ▲▲▲▲▲▲▲▲

escribo tu nombre en mi pared, con fucsia, con marrón.
ay, no hay chances, te gustan los hombres, te gustan los hombres.
no hay chances.
abro mi placard, ropa de mujer. voy a cruzarme, voy a cruzarme, voy a cruzar.
y si te gustan los hombres, te gustan los hombres.
abro mi placard, ropa de mujer. voy a cruzarme, voy a cruzarme, voy a cruzar.
nada nada nada nada nada.
y si te gustan los hombres, te gustan los hombres.

living

es mentira: yo no sé nadar.
pero no tengo miedo de ahogarme.
menos en el agua de tu vaso, es que vos no te cansás de mi.
me encanta sentirme así de bienvenida, agarrar los límites, mostrartelos, pedirte que nunca más los recuerdes
y mandarlos a la mierda
aprender a nadar en las cosas buenas, sin temor, sin antiparras, sin ropa, sin pensar en que no sé nadar, no sé mentir, no sé ahogarme, no sé si te cansás o no de mi, no sé.
no sé por qué venimos hablando tanto de los planetas y esas cosas que parecen estar muy lejos
si todo lo que necesitamos está dentro de la heladera.
son estas hojas blancas para dibujarnos besos.
y el resto. bien puede ser un laberinto.