23:19

cuánto que estaba amando en ese momento era increíble
puede que me olvide de esto si no te digo rápido que vos
no rompiste nada tengo que empezar a asumir eso 
yo siempre fui el fuego prendiéndome a mi misma
yo tenía miedo de quemarme la cabeza
cuando ya mis cenizas se extendían inmensas eran
el castillo gris donde dormíamos desnudos todas las noches del mundo

no puedo estar dentro del mundo
escuchar el timbre el teléfono la máquina del café
la máquina del mal la gran mente colectiva
las manos de dios trayendo el impulso creativo
en otra realidad hay nuevas versiones de mí
y fuera del mundo el cielo
la isla la montaña
la aurora perdida y el paraíso negro
la sincronía de los átomos del
2 + 2
del
yo + vos
los meteoritos eran mini lunas sin atmósfera
quemaban el desierto y yo corría
lunas chiquitas durante todo el día
me mataban me moría
señor
pare el taxi por favor
estoy a punto de vomitar luz
querés saber dónde estaba
batiéndome en un duelo de espadas
contra la sabiduría más profunda
contra el núcleo brillante del universo